Con la mayoría de edad apenas alcanzada, los jóvenes se enfrentan a la decisión más importante de sus vidas, la que escribirá las páginas de su futuro y marcará su desarrollo como profesionales y como personas. Elegir titulación universitaria entre un catálogo de Grados que no deja de crecer no es una tarea fácil, por lo que planteamos en este reportaje algunas cuestiones que pueden ayudar a quienes estén reflexionando sobre este asunto tan crucial para ellos. ABC ha dialogado con algunos de los interlocutores que mejor pueden ayudar a los inminentes universitarios, una nutrida representación de las principales instituciones académicas que tienen sede en Sevilla, ya sean de ámbito público o privado.
Entre las principales conclusiones que se extraen de este encuentro se sitúa en primer plano la importancia de una buena elección, para lo que es preciso que el alumno conozca la amplia oferta académica que tiene a su alcance y que sepa identificar qué Grados se adaptan mejor a su vocación, a su forma de ser y a sus expectativas de vida. Estos expertos han glosado también cuáles son los títulos con más demanda de sus centros y otras cuestiones como la necesidad de aplicar desde primera hora un carácter práctico a la formación curricular y de completar el aprendizaje de los alumnos con actividades extraacadémicas.
Los participantes en esta mesa redonda son Ramón Bullón, director de Innovación y Marketing de la Cámara de Comercio de Sevilla y Centro Universitario EUSA; Ignacio de la Vega, director de ESIC Andalucía; Cristina Yanes, vicerrectora de Ordenación Académica de la Universidad de Sevilla; Mar García, directora general de Comunicación de la Universidad de Sevilla; Beatriz Hoster, directora del Centro de Estudios Universitarios (CEU) Cardenal Spínola; Eugenio Fedriani, vicerrector de Ordenación Académica de la Universidad Pablo de Olavide y Francisco Pérez Fresquet, adjunto al rector de la Universidad Loyola Andalucía.
Para Eugenio Fedriani, la orientación al alumno es clave para que esté motivado durante sus estudios universitarios. «Tenemos informes realizados donde se evidencia que, si la motivación no es la adecuada, los estudios fracasan», afirma.
Para orientar a los alumnos de Bachillerato, la Universidad Pablo de Olavide cuenta con una jornada de bienvenida que «suele tener buena acogida porque se les da la posibilidad de interactuar, preguntar y que vean la pluralidad de oferta que hay. Los estudiantes lo que más valoran es que somos una universidad flexible y que seamos capaces de prepararles para una situación laboral incierta, porque la situación laboral generalmente no tiene nada que ver cuando terminan sus estudios respecto a cuando los empezaron».
También el Salón del Estudiante de la Universidad de Sevilla, que este año se celebra del 5 al 9 de abril, es una cita clave para informar sobre la oferta académica de esta otra institución, como señala su vicerrectora de Ordenación Académica. «Tiene un gran impacto social en la provincia de Sevilla, ya que son los propios alumnos de los Grados los que atienden a los estudiantes preuniversitarios y responden sus preguntas», dice Cristina Yanes. Ramón Bullón, por su lado, asegura que es clave mejorar la información que llega a los jóvenes sobre la oferta académica.
«Nosotros editamos desde hace 20 años una guía de orientación de la que distribuimos 35.000 ejemplares en centros escolares. Queremos gente que tenga información y cuando decida estar con nosotros sea porque quiere estar con nosotros de verdad, pero el chico debe conocer todos los itinerarios», manifiesta.
Desde hace cuatro años elaboran en la Escuela de Negocios de la Cámara de Comercio un estudio sobre la idea que tienen los alumnos de la empleabilidad de los Grados y generalmente no se corresponde con la realidad. «Ellos creen que eligen la carrera porque tiene salidas laborales pero no están bien informados de si es o no así». Por ese motivo, cada vez hacen más actuaciones para informar al alumnado preuniversitario. «Los centros son muy receptivos y contribuimos a ayudar a los estudiantes a elegir su futuro, porque el desarrollo madurativo de la persona le puede llevar a coger una carrera y equivocarse, pero esto no debe ocurrir porque tenga falta de información de las distintas opciones que tiene».
De igual manera piensan en el Centro de Estudios Universitarios Cardenal Spínola, donde una de las acciones principales en el programa de acogida va orientada hacia la corroboración de la vocación del estudiante y el autodiagnóstico para ver si ha acertado con la elección. «Es llamativo que los que entran con nota de corte baja, al terminar sus estudios, lleguen a ser tan competentes como los que traían una nota de corte alta. Se demuestra que la constancia, el trabajo, el esfuerzo diario y el asesoramiento de los especialistas pueden lograr resultados óptimos», indica Beatriz Hoster.
ESIC es consciente de esa problemática y cada año lleva a sus instalaciones a más de 1.400 jóvenes para que conozcan su oferta académica, además de actividades como el «Desafío Junior Empresarial» entre alumnos de Bachillerato y Ciclos Formativos o el asesoramiento particular a padres y tutores.
Como no solo de pan vive el hombre, las universidades y escuelas de negocios saben que la formación del alumno debe traspasar el aula y enfocarse desde un punto de vista integral, cultivando otros aspectos no menos importantes que el curricular. Así, en el Centro de
Estudios Universitarios Cardenal Spínola cada miércoles reciben a un profesional vinculado a cada Grado que relata a los alumnos su experiencia y con el que pueden establecer un diálogo. También cuentan con servicio pastoral y voluntariado. Igualmente vinculado con la iglesia, ESIC propone tareas de voluntariado a sus alumnos a través de su Fundación Orbayu, además de ofrecer conferencias, mesas redondas y seminarios durante todo el año.
En Universidad Loyola Andalucía tienen Aula de literatura, de música, de debate, voluntariado… con el fin de que «puedan crecer como personas». También deportes, aceleradoras de empresas, participación en estudios de grabación y de radio para que aprendan a relacionarse con los medios…
En EUSA, por su lado, cuentan con el programa «Emprésate 360º», que desde el primer curso ofrece al estudiante la posibilidad de trabajar hasta 10 competencias transversales, mientras que en la Universidad Pablo de Olavide, su vicerrector de Ordenación Académica destaca la promoción social y cultural que tienen, donde entran teatro, coro, voluntariado, flamenco, radio y un programa que acaban de estrenar con el nombre «Espacio de Cultura Mínima» y que se desarrolla los jueves por la tarde junto a la parada del Metro.
Cristina Yanes recuerda que la Universidad de Sevilla acaba de crear un Vicerrectorado de Servicios Sociales y Comunitarios para centrarse en todas estas cuestiones y cita algunos de los servicios que ofrecen fuera del aula, como la programación del Centro de Iniciativas Culturales de la Universidad de Sevilla o su Centro de Formación Permanente.
Francisco Pérez Fresquet va más allá y valora los posibles motivos que puede tener un estudiante para elegir su carrera universitaria. «La primera influencia que tiene viene de los amigos, aunque también la familia, internet, las modas y los medios de comunicación ejercen un gran poder sobre su decisión». A su entender, habría que revalorizar la figura del orientador en los colegios porque puede marcar el futuro de los jóvenes. «En los últimos años se han creado muchos títulos nuevos y no se conocen. Hay padres que siguen pensando en las cinco carreras de siempre y es preciso que se determinen cuáles son los potenciales de cada chico para que, a partir de ahí, pueda encontrar su camino».
Cada uno de los participantes de esta mesa redonda evoca algunos de los Grados que suelen tener mejor acogida entre la oferta de los centros e instituciones académicas que hay en Sevilla. Las universidades públicas son las que presentan una mayor oferta, siendo la Universidad de Sevilla una de las que tiene un catálogo más amplio de títulos en España. Su vicerrectora de Ordenación Académica enumera los Grados que tienen una nota de corte superior a 12: Biomedicina, Bioquímica, Ingeniería Aeroespacial, Medicina, y dobles Física y Matemáticas y Farmacia y Óptica y Optometría. «Tenemos siete Grados conjuntos con Málaga y Granada, 18 dobles Grados nacionales y 11 Grados internacionales», apunta Cristina Yanes.
Su homólogo en la Pablo de Olavide, Eugenio Fedriani, recuerda que la doble titulación de ADE y Derecho es de las que tiene mejor acogida entre los alumnos, junto a otras en las que la nota de corte es elevada, como Biotecnología, Traducción e Interpretación, Ciencias de la Actividad Física y el Deporte, y los dobles Grados. Eso sí, reconoce que no siempre la nota de corte elevada se corresponde con una buena empleabilidad del título. «Tenemos notas de corte altas de algunas carreras porque ofrecemos pocas plazas, ya que, como universidad pública que somos, tenemos que atender las necesidades de la sociedad y hay titulaciones para las que no va a haber salida profesional para tantos egresados, con lo que no tiene sentido sobre ofertarlas».
EUSA y el Centro de Estudios Universitarios Cardenal Spínola, por su lado, son dos centros adscritos a la Universidad de Sevilla que ofrecen Grados de Comunicación y Turismo, el primero (en total son cuatro Grados y uno doble en Comunicación Audiovisual y Periodismo), y de Educación Primaria e Infantil, el CEU, aunque en los últimos años ha incorporado Derecho y Ciencias de la Actividad física y el Deporte. En ESIC su punto fuerte es el Grado de Marketing, que ofrecen en Sevilla desde hace 23 años. «Hemos notado un repunte considerable de las dobles titulaciones, que son una buena opción para mucha gente porque mejora la capacidad de empleabilidad de los estudiantes», asegura su director en Andalucía. «Hacer
ADE y Marketing te permite trabajar en el ámbito financiero, comercial, de recursos humanos o de marketing, entre otros».
La Universidad Loyola Andalucía, aún siendo la más joven de todas con tan solo tres años de trayectoria, ofrece 16 Grados simples y 24 Grados dobles, modelo este último del que están «absolutamente convencidos», como explica Francisco Pérez Fresquet. «Todos nuestros Grados tienen asignaturas en inglés y algunos de ellos son bilingües; son títulos novedosos en configuración y la presencia y las prácticas son obligatorias. Nuestro profesorado —añade— tiene formación de carácter internacional».
Para todos los presentes en este encuentro las prácticas constituyen un asunto de vital importancia en la formación universitaria. «Las privadas, desde un principio, apostamos por el carácter práctico de las titulaciones y las públicas, con Bolonia, han adquirido un sentido mucho más práctico», resume Ignacio de la Vega.
Mar García Gordillo, de la Universidad de Sevilla, recurre a algunas de las cifras que maneja la Hispalense en este ámbito: unas 13.000 prácticas anuales y más de 5.000 convenios con empresas. A este respecto, Ramón Bullón pone de manifiesto el déficit que existe en cuanto a prácticas que fomenten el autoempleo y el carácter emprendedor de los universitarios. «Hoy día un estudiante espera a terminar su carrera para plantearse el autoempleo», critica. «En la Cámara de Comercio este año se han dado de alta 600 empresas y se echa en falta que haya más concienciación del público universitario porque el nivel de estudios de estos emprendedores no se corresponde con el universitario. Debe haber experiencias reales de creación de empresas antes de salir de la universidad». Sobre este asunto Francisco Pérez
Fresquet es positivo y considera que «con el tiempo, el carácter emprendedor será curricular».